DÍA DE LA MUJER: HOMENAJE A DOLORES SOPEÑA

Dolores Sopeña, Beata desde 2003 y en proceso de Canonización, fue una mujer excepcional, digno ejemplo para conmemorar el Día de la Mujer que celebramos internacionalmente el próximo 8 de marzo.

A estas alturas, ya lo sabemos todos los que la conocemos.

Pero, cada día, gracias al trabajo de las Catequistas y, por extensión, de toda la Familia Sopeña que sigue adelante con su gran obra apostólica, la Fundación Dolores Sopeña, su prestigio y su gloria crecen.

Fruto de una casualidad, a partir de una visita a la Casa Natal de Dolores Sopeña en Vélez Rubio (Almería), Marcia de Abreu, presidenta de la Asociación de Mujeres por la Paz Mundial, decidió que este año, para el Día de la Mujer, su organización honraría a Dolores Sopeña.

Con esta intención, han organizado una mesa redonda, prevista para el viernes 6 de marzo en Madrid, en la que intervendrá María Jesús González, Catequista Sopeña y experta conocedora de Dolores como mujer y como madre fundadora del Instituto Catequista.

Y, por otro lado, los asistentes contarán con otro punto de vista, el de la responsable de su Casa Natal en la localidad almeriense, Inmaculada Ramón.

Dolores, desde bien jovencita, casi niña, y junto a otras mujeres de su tiempo, fue pionera en su interés por los problemas sociales, en una agitada mitad del siglo XIX.

Su vocación siempre fue mejorar el mundo que la rodeaba, centrada en cada persona en su individualidad, y acercar a Dios a aquellas personas, alejadas y excluidas socialmente.

Esta mesa redonda organizada por la Asociación de Mujeres por la Paz Mundial es una invitación a conocer la vida y la obra de Dolores que, inspirada por su profunda fe, viajó superando fronteras y educando y facilitando oportunidades a hombres y mujeres adultos, miembros de familias trabajadoras.

Es un honor para el Instituto Catequista este reconocimiento a quien fue una mujer ejemplar, de gran sensibilidad social e inquietud apostólica que dedicó su vida a impulsar la fraternidad y a reconocer a cada persona como un hijo de Dios, al margen de su condición social, cultural y religiosa.

El acto tendrá lugar el viernes, 6 de marzo de 2020 a las 19.00 horas, en el Espacio Ronda, C/ Ronda de Segovia, 50 (Puerta de Toledo) Metro Puerta de Toledo.

La entrada será libre hasta completar aforo.

Día de la Mujer Dolores Sopeña

GRACIAS POR LA MISIÓN QUE NOS DEJASTE

Catequistas, Laicos y colaboradores de los Centros formativos hicimos realidad una vez más el sentimiento de la Familia Sopeña, compartiendo una eucaristía en la que dar gracias por la vida y la misión que nos dejó nuestra fundadora, la Beata Dolores Sopeña.

La celebración era asimismo un recuerdo por el aniversario de su nacimiento que, cada inicio de año, nos reúne en torno a Jesús, la figura que realmente marcó la vida de Dolores Sopeña y, después, la nuestra.

Y cada miembro de la Familia Sopeña estuvo y está desde su lugar y posición; pero todos iguales de presentes e indispensables para el Carisma y para la continuidad de nuestra Misión, que no es otra que llevar la Buena Nueva a los más vulnerables, a los más alejados de Dios y de la sociedad.

Desde el lema apostólico de este año: Sopeña sueña, hazlo posible, miramos como lo hacía Dolores: con ojos de Jesús. Ella sentía su realidad y la sociedad que la rodeaba como un lugar donde ella podía hacer mejoras.

Superando barreras personales, muchas veces físicas, y contratiempos la Beata Dolores Sopeña comenzó a soñar y, con la ayuda del Espíritu, se desvivió por llevar a todas partes el Evangelio, por extender la palabra de Dios y construir un Reino mejor, con justicia y con fraternidad entre todos los hombres y mujeres, independientemente de su origen y estrato social.

El Instituto Catequista Dolores Sopeña y la Fundación Dolores Sopeña, donde se acoge también al Movimiento de Laicos y a los Jóvenes Sopeña, somos el fruto de ese sueño.

Acción Gracias Dolores Sopeña

Y por eso, conviene que, además de dar gracias, nos paremos a reflexionar sobre ¿qué soñamos nosotros?, si estamos dispuestos a trabajar por nuestros anhelos o ¿a qué estamos llamados cada uno de nosotros?

En la Eucaristía, que no es otra cosa que la reunión de hermanos ante los ojos del Padre, aprovechamos a pedir por todos esos sueños, especialmente el de llevar a cabo la Misión Compartida, esencia de las Catequistas Sopeña y la familia Sopeña en general.

Desde aquí pedimos también la fortaleza y la valentía para hacerlos realidad, de la manera en que lo hizo Dolores Sopeña, con la esperanza y la confianza puestas en Dios.

Gracias Dolores por hacernos partícipes de tu Misión.